EL CASO DEL VIRUS MISTERIOSO

EL CASO DEL VIRUS MISTERIOSO

Detritus, El Civil, salió a la calle al día siguiente de la Declaración del Estado de Alarma, por causa de un virus misterioso, y salió por un caso de fuerza mayor: se encontró en pleno centro de la ciudad, con chavales en monopatín y grupos de personas con cara de asombro. 

En días posteriores, salía cada 3 ó 4 días a por lo imprescindible y se encontraba con gente que se comportaba como en días anteriores: sin distancias entre individuos y haciendo todo lo contrario a lo establecido por las autoridades sanitarias.

Cuando hubo mascarillas, Detritus se puso una cada vez que salía a la calle; viendo que casi nadie la llevaba, se percató de que la mayoría de las personas que no la llevaban, fundamentalmente jóvenes, le dirigían miradas de odio que venían a espetarle algo semejante a: “¡bichoo…!”

                                                  Virus de Ébola

Pasaron los días; la información por parte de los expertos virólogos y de otras disciplinas, era extensa. En lo que respecta  al ciudadano Detritus, éste era un gran admirador de los virus, sí de los miles de virus que pululan por el Orbe, y era consciente de la gravedad de la situación; no obstante en la calle la gente se comportaba como en épocas libres de pandemia, las mascarillas, los que las llevaban, iban con ellas en el cuello, en la mano, o guardadas en el bolsillo,  Detritus constató que estos insolidarios descerebrados seguían mirándole con saña; a esta imbecilidad se sumaban los  botellones, las aglomeraciones en playas, escapadas en coche, comidas familiares y varias agrupaciones por el estilo, sin la toma de precauciones requeridas y avisadas por los agentes sanitarios.

                                              Virus de la Poliomielitis

El Gobierno de Turno, avisó que estos comportamientos peligrosos, iban a ser sancionados con multas más o menos elevadas; la realidad viene a demostrar que la única medida disuasoria para que no se den hechos peligrosos e incívicos, consiste en sablear el bolsillo de todo aquel insensato atolondrado que en sí mismo es un “virus” letal para la vida en sociedad, claro que, si estas medidas no se llevan a la práctica, no sirven para nada.  La gente ha hecho y seguirá haciendo caso omiso de las recomendaciones de las autoridades mientras que no les hagan abonar la multa correspondiente, el comportamiento de estos zombis se autorreproduce si no encuentra las cortapisas que reclama su criminal insensatez.

                                                      Virus del Sida


A estas alturas de la pandemia, con 28.000 muertos en el Estado *X, siguen con la carencia de personal médico en los hospitales públicos, claro que la sanidad  pública se ha venido esquilmando  mientras se aumentaban las ayudas a lo privado con dinero público.

                   
                                                    Virus de la Rabia

Detritus, El Civil, no sale de su asombro al escuchar a diversos personajes de la derecha decir que no tiene que pararse la industria y demás negocios, y se pregunta que cuando la cosa explote, que lo hará pronto, cuando a los contagiados ya no se les pueda atender por falta de atención médica y por falta de espacio en los centros de salud ¿Que negocios va a haber y quien los va a atender?  A Detritus se le aclararon bastante las ideas al leer un twitt de un ciudadano que decía; “¿Cuándo nos van a quitar el bozal?”. Realmente el ciudadano de casi todos los estratos culturales piensa eso, o sea: no piensa.  Entre el cambio climático ya incontrolable, cuya consecuencia directa son la proliferación de virus y pandemia, y que el zombi de turno está en la inopia.

                                             Virus de la Viruela

Detritus hecha cuentas: aglomeraciones con cientos y miles de personas, en forma de botellones, festejos populares con vaquillas maltratadas incluidas, eventos deportivos masificados, mal uso o ausencia de uso de mascarillas, higiene cero, los contagios aumentan cada día, se duplican y se triplican, y así se llegará a tener los enfermos tirados en las aceras y en los bancos públicos, en parques y quizá en las carreteras. Ya lo dijo Santo Domingo de Guzmán, uno de los padres de la Inquisición española, y que fue apedreado en el Languedoc: "Donde no vale la bendición prevalecerá estaca". Pero, ¿Quién portará la estaca?.

Virus de la gripe común. Se aprecia cómo se expande el virus al hablar; las gotitas salen por la boca y vías respiratorias. En un simple puntito menor que la cabeza de un alfiler caben millones de estos virus ¿Se entiende el asunto?

La OMS (Organización Mundial de la Salud) alerta por un nuevo y potencialmente mortal agente patógeno: la "enfermedad X" ¿Qué, vamos de fiesta?