martes, 8 de septiembre de 2020

El gato que se orinaba por las esquinas.  💦


Pinki, dejaba charquitos de orina por aquí y por allá:  tienes que solucionar el problema. El primer paso que debe tomarse antes de cualquier otro es pedir cita con el veterinario ¿Por qué? Porque la eliminación inapropiada suele estar provocada por un problema físico, o al menos puede empezar por esa causa, casi siempre una infección urinaria. Si no identificas y tratas el problema de salud, no tendrás probabilidades de arreglar ese problema de comportamiento. Y tampoco actuarás de forma muy justa con el gato.





Uno de los motivos por los que el gato orina o defeca fuera del arenero, es porque está muy sucio. Hay que limpiarlo un mínimo de dos veces al día: por la mañana y por la noche. Si no es posible, hay que limpiarlo UNA VEZ AL DÍA, sin excusas. Y una vez por semana con lejía. Aclarar bien.


RECUERDA: Si tienes un gato enfermo, de poco servirá que pruebes todas las estratagemas de comportamiento del mundo. Para empezar a cambiar la conducta inadecuada de tu gato, debes comprobar que ESTÉ SANO.


¿Que probabilidades hay de que un problema de carácter médico provoque que tu gato evite el arenero o marque su territorio? MUCHAS. El veterinario puede pedirte un análisis de orina y sangre y una ecografía o radiografía abdominal para descartar problemas médicos antes de afirmar que la mascota está sana.





Otro motivo por el cual el gato hace sus necesidad fuera de la caja es porque está enfermo. Hay que llevarlo cuanto antes al veterinario, y recuerda, cuanto antes soluciones el problema menos dinero gastarás.



RECUERDA: Tu gato no puede hablar, con el lenguaje humano, así que su organismo se expresa por él. El veterinario está entrenado para buscar las claves de lo que  puede ser un rompecabezas bastante complejo. Tus propias observaciones son tremendamente importantes, así que lleva tus notas. Y por último, convéncete de que los análisis de sangre y orina son pruebas de diagnóstico, no peticiones para engrosar la cuenta del veterinario: son esenciales para obtener un diagnóstico preciso.







Cristales de estruvite o urolitiasis. Al tratar de pasar por el tracto urinario, el gato siente fuertes dolores. Si es este el problema, el gato tiene que comer pienso especial. El profesional te lo aconsejará.


Las afecciones del tracto urinario son una de las razones más frecuentes por las cuales los gatos no utilizan el arenero, pero no son las únicas.A continuación se incluye una lista de otros factores que tu veterinario puede buscar en sus exámenes (pero la lista no incluye todas las posibilidades).




* Problemas en el tracto urinario o en la vejiga: Un gato con este tipo de problemas siente ardor al orinar. Y como no puede decirse "Supongo que estoy enfermo" sino más bien "Usar el arenero me hace daño" deja de usarlo. Este tipo de problemas puede inducir la marcación del territorio.


* Medicamentos: Si tu gato está en tratamiento con una medicina, por ejemplo un esteroide o un diurético, puede que beba más agua y orine más o puede que sus excrementos sean más líquidos. Cualquiera de estas situaciones puede impedirle llegar a tiempo al arenero.





El gato trata de orinar, pero le duele mucho. Hay que llevarlo al veterinario lo antes posible. Suele cerrar los ojos y hacer un gesto de apriete con la boca. HACE ESFUERZOS DOLOROSOS.



* Enfermedades infecciosas: Los virus de leucemia felina, de inmunodeficiencia felina o de peritonitis infecciosa felina pueden enfermar a un gato lo suficiente como para que ir al arenero deje de ser una prioridad.


* Enfermedades no infecciosas: La diabetes sin tratamiento puede aumentar la cantidad de orina que produce un gato. De hecho, las micciones frecuentes son un síntoma por el que preguntan los veterinarios cuando sospechan que el gato tiene esa enfermedad.El hipotiroidismo, que más que nada afecta a los gatos mayores cuando la tiroides tiene exceso de actividad, también aumenta la producción de orina.




Estate atent@ al comportamiento de tu gato, si ves que se comporta de un modo atípico, pide hora con tu veterinario, para evitar que los problemas del animal se agraven; cuando antes atajes el problema, ahorrarás en la factura.



* Causas relacionadas con la edad: Algunos gatos pueden volverse seniles con los años, y no les importa mucho dónde hacen sus necesidades. Otros pueden presentar artritis, que les dificulta la tarea de entrar o salir del cajón de arena, o llegar a él si está lejos.


* Estreñimiento u obstipación: Un gato puede experimentar grandes molestias cuando no logra expulsar las heces, y trata de aliviarlas pujando para lograrlo. Los resultados pueden parecerse a diarrea, pues se produce una sustancia líquida debido a los esfuerzos para expulsar la masa. Tal como sucede en el caso de una infección urinaria, el gato empezará a asociar el arenero con el dolor, y lo evitará.





También puede ser que tu gato tenga alergia a un tipo de arena, algunas arenas ocasionan afecciones respiratorias y oculares. Las últimas tierras comercializadas que dan muy buenos resultados son las que contiene madera prensada.


* Diarrea: Las heces demasiado líquidas también son un problema porque dificultan llegar hasta el arenero. La diarrea es sólo un síntoma, cuyas causas pueden variar, sobre todo en casos que duran mucho tiempo.


* Parásitos y lombrices intestinales: Algunos parásitos se reproducen dejando sus huevos o larvas para que sean evacuados con las heces, y una vez en el exterior otro animal entra en contacto con ellos y se infecta. También las lombrices terminan en las heces. Cuando su número aumenta, al gato le es más difícil alcanzar a llegar al cajón de arena.





Tu gato da vueltas alrededor del arenero, entra y sale corriendo, o lo arranca, es que tiene un problema; o está muy sucio o el gato tiene un problema con la orina; puede que le duela al orinar, y créeme, los gatos aguantan mucho el dolor sin quejarse, cuando lo hacen suele ser tarde. Al menor problema, urge una visita al veterinario.


Puede que el diagnóstico correcto y el tratamiento adecuado resuelvan el problema de eliminación inapropiada, pero no siempre es así. Para eso es necesario que el veterinario realice un seguimiento. Muy a menudo la gente se toma la molestia de llevar al animal al veterinario, pero no deja que se le hagan los análisis, y le dan al pobre médico la triste opción de no poder ofrecer nada más que una suposición y un tratamiento con antibióticos. Incluso si el veterinario atinara en el diagnóstico y el problema fuera una infección urinaria, puede que haga falta más de un antibiótico para curarla. 






 Si está echado, para llegar a esta postura de postración ha tenido que pasar mucho tiempo enfermo, y ya está en las últimas. Urge la visita al veterinario ANTES DE LLEGAR A ESTA SITUACIÓN.





Más aún, es posible que no se pueda descubrir otro problema bajo la infección, como cálculos de la vejiga o un tumor. Hasta que ese problema de fondo no se cure, la infección y sus síntomas reaparecerán. Si supones que tu gato está bien porque acaba de pasar por un tratamiento con antibióticos, puede que te lleves la sorpresa de tener aún a un gato enfermo. Y eso indica tres cosas:

PRIMERA: Que tu gato aún sufre; y sufren MUCHO EN SILENCIO.

SEGUNDA: Que a la larga va a costarte más dinero que si hubieras atacado el problema de raíz y;

TERCERA: Que ninguna de las estrategias de comportamiento que utilices va a ser EFICAZ. PREVENIR CURA Y ABARATA LA FACTURA.




¡Nunca lo castigues!

Por último, jamás debemos castigar al gato, no olvidemos que no lo hace a propósito y para él también es una situación difícil. Ni encierros ni pistola de agua ni ningún otro método similar. Nuestro gato no puede hablar pero nos está pidiendo ayuda. Al contrario, debemos prestar más atención a todas sus reacciones para encontrar la causa subyacente y premiar, siempre, la buena conducta. Ten presente que el refuerzo positivo es la clave del éxito.




UN GATO QUE DE REPENTE SE VUELVE AGRESIVO, es por enfermedad. Si te resulta peligroso cogerlo, habla con el veterinario, para que te de un calmante y mézclalo con su comida, cuando se tranquilice, al transportan y al veterinario




FUENTE: "GATOS PARA DUMMIES"
Aprende a:
*Comprender el lenguaje felino
*Educar y cuidar de forma adecuada a tu mascota
*Identificar cuándo tu gato está bien y cuándo tiene problemas

AUTORES: Gina Spadafori
Periodista

Paul D. Pion
Veterinario

Revisado por Carlos Rodríguez
Veterinario presentador del programa "Como el perro y el gato"

(c) Centro Libros PAPF, S.L.U., 2011
Grupo Planeta, Barcelona
www.paradummies.es













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